El Hosquillo (III)
El Hosquillo se sitúa en la cabecera del río Escabas. Justo por encima del farallón rocoso del rincón del Buitre, el río Escabas se forma gracias al aporte de varios arroyos, el vallejo del Agua, del Sotillo y de la Alconera y se despeñan en rápidos y cascadas en la hondonada de El Hosquillo. Allí se juntan las aguas del arroyo de las Truchas (procedente de la zona norte de Las Majadas), del arroyo del Escalerón y de la fuente del Berral (junto a las mismas casas de El Hosquillo).
El Hosquillo es una gran hondonada ovalada de unos 3,5 kilómetros de longitud, orientada de sureste a noroeste, y una anchura de 200 metros. Esta forma hizo que el geógrafo y estadista Pascual Madoz le llamase "el Orquillo". Es un valle disimétrico al que podemos calificar como surco intramontañoso, abierto a favor de las arenas y areniscas del Cretácico inferior.
El flanco norte orientado a la solana, está formado por un fuerte talud donde son visibles todos los niveles calizos del Cretácico Superior, culminando con un cortado vertical formado por las rocas calcáreas masivas del Turonense. En el flanco sur, en la zona de umbría, afloran las capas margosas del Jurásico Superior por lo que su talud es bastante más suave, coronando en sus partes altas por un conjunto calcáreo bien estratificado del Jurásico Medio de donde proceden las aguas que manan en la fuente del Berral. El surco está cerrado tanto en la cabecera como en la salida por una muralla de escarpes verticales formados por los niveles masivos del Turonense.
En este paraje cubierto de un espléndido bosque de pinos, hay constancia de que en el año 1873 existía un pino llamado "el abuelo" por medir más de 2 metros de diámetro y unos 30 metros de altura.